¿Qué es el test de Zarit?

El test de Zarit es una herramienta que te permite evaluar y conocer tu carga como cuidador.

Para tratar adecuadamente el estrés o el cansancio que se presentan, debes conocer información sobre por qué se producen, cómo se manifiestan y cómo puedes prevenirlos o enfrentarlos.

El test o escala de Zarit consiste en 22 preguntas concretas que debes puntuar del 0 al 4 según la frecuencia con la que enfrentas las situaciones propuestas, arrojando como resultado una puntuación de hasta 88 puntos, donde podrás saber si existe o no sobrecarga y en qué medida.

Origen del test Zarit

Lleva este nombre gracias a su creador, Steven H. Zarit, un profesor de Desarrollo Humano de la Universidad Estatal de Pensilvania, quien en 1980, desarrolló esta herramienta para determinar el grado de sobrecarga de un cuidador de una persona dependiente o con demencia.

¿Cómo aplicar la escala de Zarit?

Lee cada párrafo e indica con qué frecuencia te sientes identificado con la situación mencionada.

Cada ítem se valora así:

¿Cómo interpretar la escala de Zarit?

Algunas veces en el oficio de los cuidadores se presentan confusiones sobre cuándo sientes cariño y afecto hacia el paciente o cuándo sientes que lo que haces es una obligación llegando incluso a la frustración que trae como consecuencias el conocido síndrome del cuidador quemado o burnout.

Si bien no existen normas ni puntos de corte establecidos, los resultados se suelen interpretar así:

  • Ausencia de sobrecarga: cuando tienes una puntuación inferior a 46.
  • Sobrecarga ligera: cuando tu puntuación está entre 47 y 55.
  • Sobrecarga intensa: cuando tienes una puntuación superior a 56.

Intenta ser analítico, no solo con el resultado final, sino también en aquellos puntos que marcaste la situación como frecuente. ¿Qué puedes hacer para mejorar ese aspecto? Siempre puedes buscar ayuda profesional o hablar con un conocido.

Consejos para prevenir la sobrecarga del cuidador

Si tu test dice que tienes una sobrecarga laboral, identifica si estás padeciendo del síndrome del cuidador y empieza a realizar acciones para prevenir o mitigar los problemas de salud que vienen con él. Algunos consejos que puedes poner en práctica son los siguientes:

  1. Duerme y descansa lo suficiente: la Organización Mundial de la Salud recomienda que los adultos duerman de 7 a 8 horas diarias.
  2. Tener tiempo libre para ti mismo: haz más de lo que te gusta; lee un libro, asiste a una clase de yoga o baile o sal a dar un paseo con tus amigos, eso son muestras de autoestima.
  3. Ten hábitos de vida saludables: haz un poco de ejercicio físico todos los días, tanto de cardio como de fuerza, esto te ayudará a mantener sano tu corazón y tener un buen índice de masa muscular. Además, come sano para que te mantengas saludable, incluye todos los macronutrientes y nunca olvides hidratarte.
  4. Delega funciones: aprende a delegar algunas responsabilidades en amigos y familiares para que puedas realizar otras actividades que te apasionen, está bien repartir los cuidados con otros miembros de la familia o busca ayuda externa.
  5. Cuida tu imagen personal: invierte tiempo en verte bien y aumenta tu confianza en sí misma.

TENA te ayuda a ser más consciente de tu situación como cuidador y te anima a cuidarte y conocer acciones preventivas para manejar tu estrés.